Wassily Kandinsky





Improvisación 28 (segunda versión)
Improvisación 28 (segunda versión), pintada por Wassily Kandinsky en 1912, refleja el empeño de este artista ruso por expresar mediante trazos y colores intensos el contenido espiritual de su obra y, en este caso concreto, la conexión entre las artes plásticas y la música.

Wassily Kandinsky (1866-1944), pintor ruso cuya investigación sobre las posibilidades de la abstracción le sitúan entre los innovadores más importantes del arte contemporáneo. Desempeñó un papel fundamental, como artista y como teórico, en el desarrollo del arte abstracto.
Nacido en Moscú el 4 de diciembre de 1866, estudió pintura y dibujo en Odesa, y derecho y economía en la Universidad de Moscú. Con 30 años se trasladó a Munich para iniciarse como pintor. Aunque sus primeras obras se enmarcan dentro de una línea naturalista, a partir de 1909, después de un viaje a París en el que quedó profundamente impresionado por la obra de los fauvistas y de los postimpresionistas, su pintura se hizo más colorista y adquirió una organización más libre. Murnau: la salida a Johannstrasse (1908) y Pintura con tres manchas (1914), ambas en el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid (España), son dos de las obras que realizó en Munich antes de volver a Rusia tras el comienzo de la I Guerra Mundial. Hacia 1913 comenzó a trabajar en las que serían consideradas como las primeras obras totalmente abstractas dentro del arte moderno: no hacían ninguna referencia a objetos del mundo físico y se inspiraban en el lenguaje musical, del que tomaban los títulos.
En 1911 formó, junto con Franz Marc y otros expresionistas alemanes, el grupo Der Blaue Reiter (El jinete azul, nombre que procede de la predilección de Kandinsky por el color azul y de Marc por los caballos). Durante ese periodo realizó tanto obras abstractas como figurativas, caracterizadas todas ellas por el brillante colorido y la complejidad del dibujo.
Su influencia en el desarrollo del arte del siglo XX se hizo aún mayor a través de sus actividades como teórico y profesor. En 1912 publicó De lo espiritual en el arte, primer tratado teórico sobre la abstracción, que difundió sus ideas por toda Europa. Entre 1918 y 1921 impartió clases en la Academia de Bellas Artes de Moscú, y entre 1922 y 1933 en la Bauhaus de Dessau, Alemania.
Después de la I Guerra Mundial sus abstracciones se volvieron cada vez más geométricas, a medida que se alejaba del estilo fluido de su primera época para introducir trazos muy marcados y diseños claros. Composición VIII nº 260 (1923, Museo Guggenheim, Nueva York, Estados Unidos), por ejemplo, es un armónico conjunto de líneas, círculos, arcos y otras formas geométricas simples. En Amarillo-rojo-azul (1925, Museo Nacional de Arte Moderno, París) la disposición de los colores y las formas geométricas proporciona una dimensión cósmica al cuadro, que puede ser interpretado como la oposición entre el amarillo y el azul, símbolos en este caso del día y la noche. En obras muy posteriores como Círculo y cuadrado (1943, colección privada) su estilo se hace más elegante y complejo, y logra, así, obras de un bellísimo equilibrio.
Fue uno de los artistas más influyentes de su generación. Como uno de los primeros exploradores de los principios de la abstracción geométrica o pura, puede considerársele uno de los pintores que sembró la semilla del expresionismo abstracto, escuela de pintura dominante desde la II Guerra Mundial. Murió el 13 de diciembre de 1944 en Neuilly-sur-Seine, en las afueras de París.
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Rodrigo Arenas Betancourt




Rodrigo Arenas Betancourt 1921-1995 Escultor colombiano, autor de las más numerosas y espectaculares obras de este género en Colombia. Vive algún tiempo en México donde estudia el arte de los muralistas mexicanos. Su obra es enérgica, aunque se ciñe a los preceptos académicos. Hijo de padres campesinos, se ha casado tres veces. Sus primeros estudios los realiza en Fredonia, luego en Medellín y finalmente en la Universidad Nacional de Bogotá. Entre 1947-1948 se instala en México y estudia en la Escuela Libre de Arte La Esmeralda. Viaja a los Estados Unidos en 1959 y luego a Europa (1966-1967). Desempeña  diversos trabajos  y  finalmente  se decide  por la escultura.  Es profesor  de dibujo  y escultura en la Universidad Obrera de xico. Fundador y profesor de la escuela de artesanías La Ciudadela en México. En su primera época en Colombia esculpe imágenes religiosas. Su escultura es una síntesis de lo arcaico, clásico y moderno con una clara tendencia precolombina. Por lo general, sus esculturas son monumentales por eltamaño, el número de figuras, la dinámica y el espacio que ocupan. La visión de grandeza va de acuerdo con los episodios que proyectan. El maestro cree que la escultura obedece al realismo que se desenvuelve con la plenitud. Entre sus obras más importantes destacan Prometeo (1956), Amantes (1958), Corazón del fuego (1964), Bovar desnudo, motivo de escándalo en os pasados, Bolívar, ndor (1985), monumento conmemorativo de la batalla del Pantano de Vargas en Paipa, Boyacá, Los Potros (1986, homenaje a José Eustasio Rivera, Neiva).
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Petrus Paulus Rubens





Las tres gracias
Las tres gracias es un cuadro de tema mitológico pintado hacia 1635 por el artista flamenco Petrus Paulus Rubens. Representa a Áglae, Eufrósine y Talía, las tres diosas griegas de la alegría, el encanto y la belleza. A la izquierda aparece retratada su segunda esposa, Elena Fourment. Actualmente forma parte de la colección del Museo del Prado de Madrid (España).


Petrus Paulus Rubens (1577-1640), pintor flamenco considerado uno de los más importantes del siglo XVII, cuyo estilo se convirtió en la definición internacional de los aspectos animados, exuberantemente sensuales, de la pintura barroca. Rubens creó un arte vibrante en el que surgen energías palpitantes a partir de la tensión entre lo intelectual y lo emotivo, entre lo clásico y lo romántico, combinando la pincelada intrépida, el color luminoso y la luz trémula de la escuela veneciana con la fuerza ferviente del arte de Miguel Ángel y el dinamismo formal de la escultura helenística. Durante 200 años, la vitalidad y la elocuencia de su obra influenciaron a artistas como Jean-Antoine Watteau, del siglo XVIII, y a Eugène Delacroix y Auguste Renoir, en el siglo XIX.
Su padre, Jan Rubens, fue un abogado de renombre, además de funcionario municipal en Amberes. Tras convertirse del catolicismo al calvinismo, Jan dejó Flandes junto a su familia debido a la persecución que sufrieron los protestantes. En 1577, nació Petrus Paulus en su exilio de Siegen, Westphalia (hoy en Alemania), también lugar de nacimiento de su hermano Philip y de su hermana Baldina. Aquí su padre se convirtió en consejero y amante de la princesa Ana de Sajonia, esposa del príncipe Guillermo I de Orange (Guillermo el Taciturno).
A la muerte de Jan Rubens en 1587, su viuda regresó con sus hijos a Amberes, donde volvieron a convertirse al catolicismo. Después de estudiar a los clásicos y servir como paje de la corte, Rubens decidió hacerse pintor. Estuvo de aprendiz, alternativamente, con Tobias Verhaecht, Adam van Noort y Otto van Veen, conocido como Vaenius, tres pintores flamencos menores, influidos por el manierismo del siglo XVI de la escuela florentino-romana. El joven Rubens fue un pintor precoz, al igual que antes había sido un temprano estudiante de las lenguas modernas europeas y de la antigüedad clásica. En 1598, a la edad de 21 años, adquirió el rango de maestro pintor en la guilda de san Lucas de Amberes.

El juicio de Paris
El juicio de Paris (c. 1639, Museo del Prado) se basa en el mito griego del pastor Paris que debe decidir cuál de las tres diosas es la más bella. Al representar los tres desnudos desde ángulos diferentes, Rubens otorga sensualidad y movimiento a la obra.



Siguiendo el ejemplo de muchos artistas del momento, Rubens sintió la necesidad de viajar a Italia, el centro del arte europeo durante dos siglos. En 1600 llegó a Venecia, donde las obras de Tiziano, Veronés y Tintoretto dejaron en él una profunda huella. Más tarde, mientras vivía en Roma, se sintió atraído por los trabajos de Miguel Ángel y Rafael, así como por la escultura grecorromana antigua.
Vincenzo Gonzaga (reinó de 1587 a 1612), duque de Mantua, contrató a Rubens durante un periodo de nueve años. Además de realizar obras originales, Rubens copió algunas pinturas renacentistas de la colección ducal y en 1605 hizo de emisario del duque en su visita al rey Felipe III de España. Durante sus años en Italia, Rubens asistió a los inicios del periodo barroco de los pintores italianos contemporáneos como Annibale Carracci y Caravaggio, y se asoció con algunos de los más importantes intelectuales humanistas del momento. Cuando Rubens dejó Italia ya no era un burgués, sino todo un caballero, y ya no estaba considerado como un artista local, sino como uno de los artistas de mayor reconocimiento mundial.
La muerte de su madre en 1608 provocó el regreso de Rubens a Amberes, donde se casó con Isabella Brant en 1609. Habiendo formulado en su paso por Italia una de las primeras expresiones innovadoras del estilo barroco, a su regreso se le consideró el pintor más importante de Flandes y, por lo tanto, fue inmediatamente contratado por el burgomaestre de la ciudad. Además, en 1609 se confirmó su éxito al ser requerido como pintor de corte del archiduque austriaco Alberto y de su esposa, la infanta española Isabel, ya que juntos gobernaban los Países Bajos como virreyes al servicio del rey de España. El número de pinturas que se le pidieron fue tan enorme que tuvo que establecer un gran taller, en el que el maestro, es decir, Rubens, sólo realizaba el boceto inicial y los toques finales, mientras que sus aprendices completaban todas las fases intermedias. Además de los encargos de Bruselas y del extranjero, Rubens estuvo muy solicitado por la militante Iglesia contrarreformista de Flandes, que juzgó que sus dramáticas y emotivas interpretaciones de los hechos religiosos, como el Tríptico de la resurrección de la cruz (1610-1611, Catedral de Amberes), eran imágenes de recuperación y renovación espiritual. La prosperidad del momento permitió a Rubens construirse una residencia de estilo italiano en la ciudad; allí albergó su gran colección de obras de arte y antigüedades.
Entre 1622 y 1630, la valía diplomática de Rubens fue equiparable a su importancia como pintor. En 1622 visitó París, donde la reina francesa María de Medici le encargó para el palacio de Luxemburgo la representación de su vida en un conjunto de pinturas alegóricas (terminadas en 1625). A pesar de la intensa pérdida que sintió Rubens tras la muerte de su esposa en 1626, continuó trabajando activamente. En 1628 los virreyes de Flandes lo enviaron a España.

Cristo en la cruz
El movimiento, el trazo ondulante y el dramatismo de la luz empleados en Cristo en la cruz (1620) son característicos en la obra de Rubens y, en este caso, se ven acentuados por el escorzo.


Mientras estuvo en Madrid recibió muchos encargos del rey de España Felipe IV, que le nombró secretario de su Consejo Privado. Rubens sirvió también como mentor del joven pintor español Diego Velázquez. Después de una delicada misión diplomática en Londres en 1629, fue nombrado caballero por el rey Carlos I de Inglaterra, para el que también realizó diversos cuadros. Rubens pintó para Carlos I los bocetos preliminares (terminados en Amberes en 1636) del mural del techo del palacio de Whitehall en Banqueting Hall.
Desde 1630, cuando se casó con Elena Fourment, hasta su muerte el 30 de mayo de 1640, Rubens vivió en Amberes, en el castillo de Steen, su residencia en el campo. Durante su última década continuó realizando encargos para los monarcas de la dinastía Habsburgo de Austria y España. Pintó, cada vez más, cuadros de interés personal, especialmente retratos de su mujer e hijos en paisajes flamencos.
Los intereses del estilo último de Rubens, de hecho de toda su carrera, están resumidos en El juicio de Paris (c. 1639, Museo del Prado). En este cuadro, las voluptuosas diosas, para una de las cuales sirvió de modelo su segunda mujer, están situadas delante de un verde paisaje que simboliza la riqueza de la creación. El color es exuberante, el estudio de luces y sombras espléndido y la pincelada sensual. Todos estos elementos fomentan el significado de lo representado, que no es otra cosa que la selección de lo más bello, la preocupación de siempre en toda la obra de Rubens. Los cuadros del pintor se conservan en la mayoría de los grandes museos del mundo. Londres es, quizá, la ciudad que contenga la colección más rica de su obra, y en el Museo del Prado de Madrid se encuentra, además de la antes mencionada, una de las más bellas, entre otras: La adoración de los Magos (1609), El rapto de Proserpina, Las tres gracias (c. 1635) y El jardín del amor (1638).
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