El futbolista inglés Stanley Matthews jugó durante 14 años en el Blackpool, club con el que en 1953 ganó la Copa de Inglaterra. En 1956 fue galardonado con el primer Balón de Oro, que le acreditaba como mejor jugador europeo de aquel año.
Stanley Matthews (1915-2000), jugador inglés de fútbol, el primero que recibió el título de sir (caballero). Conocido de forma cariñosa por el sobrenombre de Wizard of Dribble (‘El Mago del Dribling’), ha sido considerado de forma unánime el mejor futbolista británico de su generación, e incluso por muchos de todos los tiempos. Fue un extremo derecho de increíble talento y clase, que destacaba por su especial habilidad regateadora.
Nació en Hanley (Staffordshire) y debutó con un equipo local, el Stoke City, en 1932, con 17 años de edad. En 1934 defendió por primera vez la camiseta de la selección nacional inglesa, anotando un gol en la victoria que su combinado obtuvo por 4-0. La carrera de Matthews se vio interrumpida por la II Guerra Mundial (1939-1945), aunque durante ese periodo participó en 30 encuentros antes de que el fútbol internacional se reanudara tras la contienda. Su adiós con Inglaterra se produjo en 1957, cuando ya tenía 42 años, completando un total de 54 partidos con ella.
Por lo que respecta a su trayectoria con clubes, en 1947 fichó por el Blackpool y con su nuevo equipo disputó tres finales de la Copa de Inglaterra en los siguientes seis años: perdió las de 1948 y 1951, ante el Manchester United y el Newcastle United respectivamente, y consiguió el título de la prestigiosa FA Cup en 1953, cuando el Blackpool derrotó al Bolton Wanderersmet en un último partido que llegó a ser conocido como La final de Matthews. Aunque su equipo iba perdiendo, su habilidoso juego permitió que un compañero, Stanley Mortensen, marcara en tres ocasiones y diera la victoria al Blackpool en los minutos finales.
Matthews recibió numerosos galardones a lo largo de su carrera. Fue designado Futbolista del Año en 1948 y 1963, y en 1956 la prestigiosa revista francesa France Football le otorgó el primer Balón de Oro, que le acreditaba como mejor jugador europeo de aquel año. En 1961 regresó al club que le viera nacer deportivamente, el Stoke City, en el que puso fin a su carrera cuatro años más tarde, con 50 de edad, sólo unos meses después de ser nombrado sir. En el momento de su retirada, había participado en casi 800 partidos, a lo largo de una trayectoria deportiva que se prolongó durante 33 años. Posteriormente dirigió, brevemente, al Port Vale inglés y al Hibernian de Malta.
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