César Rincón (1965- ), torero colombiano, discípulo de Pepe Cáceres, que en su quinta temporada en España, después de pasar sin pena ni gloria por distintas plazas en las cuatro anteriores, toca el cielo de la gloria y consigue una hazaña que ningún matador de toros ha logrado en la historia en la monumental de Las Ventas de Madrid: abrir la Puerta Grande en cuatro ocasiones consecutivas, el 21 y 22 de mayo, el 6 de junio y el 1 de octubre de 1991.
Nacido en Bogotá el 5 de septiembre de 1965, en el seno de una familia humilde, la afición le vino de su padre, que era fotógrafo taurino. Tomó la alternativa en Bogotá, el 8 de diciembre de 1982, de manos de Antonio Chenel Antoñete, con José María Manzanares de testigo y toros de Vistahermosa. De su toreo, que debe mucho a la tauromaquia de su mentor, escribe Jorge Laverón, el crítico que mejor le conoce: "Rincón hace el toreo de verdad, y no es un misterio que se coloca ante el toro, dentro de cacho, lo espera, tira de él adelantando la muleta, y lo templa, es decir, lo lleva despacio y hacia detrás de la cadera. Se queda en el sitio y liga el muletazo siguiente, hasta tres o cuatro. En series recortadas y rematadas. Lo que debe de ser. Y para hacerlo hay que tener valor, es decir, pararse y tener cabeza para realizar lo que uno piensa; en suma, inteligencia. Dominio, equilibrio físico y psíquico para estar compuesto delante del toro".
Fue designado embajador volante de su país en Europa y asimismo representó a Colombia en la Exposición Universal de Sevilla en 1992. En 1993 sufrió una gran cornada en la feria de Sevilla. El retorno de Rincón a los ruedos ha marcado, hasta el presente, la diferenciación entre el torero de gran coraje e intuición y el diestro hasta cierto punto desorientado y expectante, pero en cualquier caso arrojado y audaz, que caracteriza su toreo en la actualidad.
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